Cada segundo de caída libre es como deshacerse en ácido corrosivo. Algunas temporadas parecen ser simples competiciones y esperas por ver quién es el siguiente en destrozarte.
No quiero más carnicerías, ¿dónde está mi piel?
Nunca dejé de confiar en vosotros, hasta ahora. Adiós columnas, ya no tengo miedo a volar o ahogarme.
2 comentaris:
Tu piel sigue allí, en el mismo sitio de siempre, estoy seguro. Si no me crees, compruébalo con un espejo :P
Beso!
Ahogarse en un vaso de agua y arrastrar contigo a alguien. El cuento de nunca acabar.
Publica un comentari a l'entrada